:: UNO ::
Mi barrio es una sed destartalada que se ha ido vaciando con los años en un charco de esquelas permanente, una sed numerada a mano libre o con troqueles viejos de cantero. Su suerte es algo trágica y morosa, pues es campo de tedio sin esperas; su destino cercano es de panteras (o de arañas y moscas), y su rumbo seguro es el naufragio. Yo lo paseo a diario con esa voluntad de los vencidos que buscan en las ruinas un refugio donde pasar el tiempo hasta que escampe... y de ese pasearlo obtengo un limo que va depositando en mi cabeza un estrato angustioso y decadente.
Mi barrio algunas veces es Corisco –los días de guardar, las fiestas grandes– y muestra sus ruinas sin vergüenza...
Algunas tardes pienso en alejarme de este desastre quieto y ser del mundo... pero luego comprendo que este espacio es mi espacio fatal... en fin, mi barrio.
Mi barrio algunas veces es Corisco –los días de guardar, las fiestas grandes– y muestra sus ruinas sin vergüenza...
Algunas tardes pienso en alejarme de este desastre quieto y ser del mundo... pero luego comprendo que este espacio es mi espacio fatal... en fin, mi barrio.
:: DOS ::
:: TRES ::
:: CUATRO ::
:: CINCO ::
:: SEIS ::
:: SIETE ::
:: OCHO ::
:: NUEVE ::
:: DIEZ ::
:: APÉNDICE ::
:: ÍNDICE ::
:: NOTA FINAL ::
:: LAVS DEO ::
:: COROLARIO ::
:: CRÉDITOS ::
:: RÚBRICA ::
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