Tuesday, August 31, 2010

La canción del verano


Oye, que lo de las canciones del verano puede ser una buena tabla desde la que buscar alguna unidad de medida del decurso humano y sus mingadas... de cuando era chico, recuerdo aquellas tonadas que tanto servían para las meriendas campestres, las bodas, las zorriondas y los bautizos... estaba el “vamos los dos, los dos, los dos; vamos los dos en compañía; vamos los dos, los dos, los dos al jardín de la alegría”, que era canción de excursión en tono amable e infantil... el “por el puente de Aranda se tiró, se tiró, se tiró el tío Juanillo, pero no se mató”, que ya era como para andar metidos en hornazo... el “por el río Nervión bajaba una piragua cargada de borrachos y todos son de Cangas”, que se hacía ya metiditos en aloques... el “Salamanca, la blanca, quién te mantiene. Cinco carboneritos que van y vienen”, que siempre salía si el vino trocaba triste y uno andaba lejos de casa, o el “Asturias, patria querida, Asturias de mis amores, quién estuviera en Asturias en todas las ocasiones”, que se entonaba si el vinillo te había puesto entre alegrón y melancólico o de cualquier otra forma... luego estaban las canciones pícaras [siempre me han encantado]... el “A mi novia le picó una avispa en la rodilla; ¡cuándo la picaré yo cuarta y media más arriba”... ésta algo más escatológica: “Como eres pequeña y fea y con malas intenciones, te untas el culo con queso pa que acudan los ratones”... o ésta de deseo: “Cuando yo era pequeñito dormía con la criada, y ahora que soy mayorcito, no quiere la condenada”... o ésta de intención: “Debajo de tu mandil tienes un conejo vivo; si quieres, voy esta noche y le doy un par de tiros”... o ésta de moda práctica: “Si yo tuviera tres reales como tengo dos y medio, te compraría un mandil con un agujero en medio”...
De mi periodo de espinillitas me quedaron dos temas de noche bruja, temas que aún canto cuando se me alegra la pajarita; el primero viene de un encuentro literario en El Escorial [culpa de Paco Novelty y de Paco Castaño, por supuesto]...”Ya no hay toros en Ledesma, ni tampoco en Villarino, ni tampoco en Fermoselle, porque se ha muerto Faustino”... y el segundo me fascina aún para cantarlo a capela y a cuatro o cinco voces cuando la noche está corrida: “Era bella y católica, como Isabel, más bien gordita, pero muy presentable; guardaba una sonrisa de papel en sus ojos, por siempre impermeables... más cuando nos casamos, la cosa cambió, usaba bigudíes, compraba al pormayor, buena esposa y mal maridada, decía cosas que mejor no nombrarlas... y se extrañó cuando le dije adiós, y se extrañó cuando le dije adiós... era el colmo del polvo y las telarañas, mataba moscas sin consideración, buena esposa y mal maridada, decía cosas que mejor no nombrarlas... y se extrañó cuando le dije adiós, y se extrañó cuando le dije adiós...”.
Luego me vienen los recuerdos de las ‘verdaderas canciones del verano’, las que ya tomaron cierta consideración mediática y se afirmaban al tirintintín del dinero... sus letras son realmente magníficas y dicen mucho de las distintas épocas... “Viajar hasta Mallorca será maravilloso, sin necesidad del coger el barco o el avión, solo caminando, en bicicleta o autostop...”, utópico turismo barato para un tiempo en el que las vacaciones le costaban un riñón a los curritos...
Voy a intentar seguir un orden con ciertas canciones del cancionero veraniego para que se vea la evolución con sus altibajos:
Año 1964. Los Tres Sudamericanos... “Me lo dijo Pérez, que estuvo en Mallorca y vino encantado de todas las cosas que vio por allí. Me lo dijo Pérez, que estuvo en Mallorca, que en todo guateque se baila el merengue, la yenka y el son...”. Parece ser que Mallorca era un destino idílico... lo mismo hasta había subvención del antiguo Ministerio de Turismo o de alguna consellería insular por entonces preinexistente.
Año 1969. Los Payos... “La playa estaba desierta, el mar bañaba tu piel, cantando con mi guitarra para ti, María Isabel...”, que seguía con un estribillino que ya alumbraba esos estribillazos que luego se nos vinieron encima [“Chiribiribí, pom pom pom pom. Chiribiribí, pom pom pom pom”] y que vienen siendo el símbolo exacto de lo que somos y hacia lo que vamos.
Año 1971. Palito Ortega... “La felicidad, ja ja ja ja, me la dio tu amor, jo jo jo jo, hoy hace cantar, ahahahah, a mi corazón, ohohohoh. La felicidad jajajaja, me la dio tu amor, ohohohoh, hoy ya se cantar, ahahaha, gracias al amor... y todo gracias al amor.”... la cosa iba subiendo de nivel y de contenido mientras la sociedad acumulaba en sus cartillinas de ahorro por si fenecía el General.
Año 1974. El Rescate... “Mi limón, mi limonero, que entero me gusta más. Un inglés dijo yeah,yeah,yeah,yeah y un francés dijo oh lala. Mi limón, mi limonero, que entero me gusta más. Un inglés dijo yeah,yeah,yeah,yeah y un francés dijo oh lala. Me siento malo, morena; cabeza hinchada, morena. Que no me paro, morena, mmm, voy voy voy”... y se nos pone la cosinina algo frutal –falta un añino para el decesísimo.
Año 1984. Radio Futura... “Arde la calle al sol de poniente, hay tribus ocultas cerca del río esperando a que caiga la noche. Hace falta valor, hace falta valor, ven a la escuela de calor. Sé lo que tengo que hacer para conseguir que tú estés loco por mí. Ven a mi lado y comprueba el tejido, mas cuida esas manos, chico. Esa paloma sobrevuela el peligro, aprendió en una escuela de calor. Hace falta valor, hace falta valor. Ven a la escuela de calor. Vas por ahí sin prestar atención y cae sobre ti una maldición. En las piscinas privadas las chicas desnudan sus cuerpos al sol. No des un paso, no des un mal paso, esto es una escuela de calor. Hace falta valor, hace falta valor, ven a la escuela de calor. Deja que me acerque, deja que me acerque a ti, quiero vivir del aire, quiero salir de aquí. Arde la calle al sol de poniente, hay tribus ocultas cerca del río esperando a que caiga la noche estoy. Hace falta valor, hace falta valor, ven a la escuela de calor”... ésta siempre fue una de mis favoritas, y he seguido a Juan Perro hasta nuestros días.
Año 1988. Pino d’Angio... “Descubrí en la discoteca su mirada de serpiente, me acerqué disimulando y me puse frente a frente. Su mirada y mi mirada de repente se encontraron. Fred Astaire a nuestro lado era estático y parado . Disparé un beso a su boca, casi se me vuelve loca y en la pista emocionada, impresionada, trastornada se me puso tan lanzada que hasta tuve que pararla, pero luego al abrazarla se me puso disparada, la cogí por la cintura y se me hizo mermelada. Oh yeah! ¿Se dice así, no? Después, después... qué idea. Gran idea, aparte de asco, ¿qué les das? Qué idea. Mira, mira qué corte te vas a llevar. Sabrá tener a raya a un engreído como tú al ver que tienes, más que nadie, solo rollo y juventud. Qué idea. Gran idea, aparte de asco, ¿qué les das? Qué idea. Toca, toca... qué corte te vas a llevar, te hará dar vueltas sin que puedas conseguir las cosas que pretendes, eres, en el fondo, un infeliz. Me arrepiento, ahora me pesa y le llevo hasta su mesa, le pregunto complaciente ‘¿quieres una naranjada?’, pero el whisky se me acaba, cinco litros que se traga... me pregunto a ver si ahora la besaba, me besaba... pero vuelve a escabullirse, de las manos se me escapa... me miraba, la miraba, se perdía, la buscaba, la encontraba, la seguía, la cogía, se soltaba, y al final la arrinconaba, y ella se me desmayaba. ¡Oh yeah! ¿Se dice así, no? Después, después... qué idea. Gran idea... aparte de asco, ¿qué les das? Qué idea. Mira, mira qué corte te vas a llevar, sabrá tener a raya a un engreído como tú al ver que tienes, más que nadie, solo rollo y juventud. Qué idea. Gran idea... aparte de asco, ¿qué les das? Qué idea. Toca, toca... qué corte te vas a llevar, te hará dar vueltas sin que puedas conseguir las cosas que pretendes, eres, en el fondo, un infeliz. Qué idea. Baila, baila, mmmm, baila, qué idea, qué idea, qué idea, gran idea... baila. Baila, qué idea, gran idea. Baila”.... oye, que a mí me flipaba esta canción y hasta me la aprendí de memoria en italiano sin saber lo que decía... aún la escucho en Youtube algunos días.
Año 1989. Los Refrescos... “Podéis tener Retiro, Casa Campo y Ateneo, podéis tener mil cines, mil teatros, mil museos, podéis tener Corrala, organillos y chulapas, pero al llegar agosto, ¡vaya, vaya!, aquí no hay playa. ¡Vaya, vaya! No hay playa. ¡Vaya, vaya! Podéis decir a gritos que es la capital de Europa, podéis ganar la Liga, podéis ganar la Copa, afirmaréis seguros que es la capital de España… Podéis tener hipódromo, Jarama y Complutense y , al lado, la Moncloa donde siguen los de siempre, podéis tener el mando del imperio en vuestras manos, pero al llegar agosto y el verano… Podéis tener la tele y los 40 Principales, podéis tener las Cortes, organismos oficiales, el Oso y el Madroño, Cibeles, Torrespaña… ¡Escucha, Leguina! Podéis tener Movida ¡hace tiempo!, Movida promovida por el Ayuntamiento, podéis rogar a Tierno o a Barranco o al que haya, pero al llegar agosto, ¡vaya, vaya!… aquí no hay playa. ¡Vaya, vaya! No hay playa. ¡Vaya, vaya!”... un tema que sigo cantando cada vez que gana el Barça y pierde el Madrid. ¡Fantástico!
Año 1997. Missiego... “Ay, chiquilla americana, desde Chile hasta La Habana, cuando dejas tu silueta volar, me hipnotizas como a un gato y mis ojos como platos no te pueden dejar de mirar. Mueve tu cu cu. Mueve tu cu cu. Mueve tu cu cu. Mueve tu cu cu.”... maravillosa, coño.. mueve ya tu cucu, nena.
Año 2000. King África... “Un movimiento sensual. Un movimiento muy sexy. Un movimiento muy sexy. Y aquí se viene el africano con el baile que es una bomba. Para bailar esto es una bomba, para gozar esto es una bomba, para menear esto es una bomba.Y las mujeres lo bailan así, así, así, así .Todo el mundo... una mano en la cabeza, una mano en la cabeza, un movimiento sexy, un movimiento sexy, una mano en la cintura, una mano en la cintura, un movimiento sexy, un movimiento sexy. Y ahora empiezo a menear suavecito para abajo, para abajo, para abajo... suavecito para arriba, para arriba, para arriba... suavecito para abajo, para abajo, para abajo... suavecito para arriba, para arriba, para arriba”... y ya se nos venía encima la verdadera bomba, ésta que nos tiene ahora medio mengaslacias y criseros.
Año 2001. Lolita... “Sarandonga, nos vamos a comer, Sarandonga, un arroz con bacalao, Sarandonga, allá en lo alto del puerto, Sarandonga, que mañana es domingo, Sarandonga, cuchibili cuchibili, Sarandonga, cuchibili cuchibili, Sarandonga, cuchibili cuchibili, Sarandonga y oyeme cantar! Esta vida hay que beberla en sorbitos de cristal. Esta vida hay que beberla en sorbitos de cristal. Un sorbito por nosotros y otro por lo que nos dan”... y fíjate que este tema siempre me ha puesto un montón. No me comprendo, coño.
Año 2002. Las Ketchup... “Asereje ja de jè de jebe tu de jebere sebiunouva majabi an de bugui an de buididipi. Aserejè ja de je de jebe tu de jebere sebiunouva majabi an de bugui an de buididipi.”... impresionante.
Y otras muchas más que dicen desde que “se me gastó el amor de tanto usarlo” hasta “ella me bate como haciendo mayonesa”... una historia mondonga del nosotros que aclara y emborrona, que ni limpia, ni fija, ni da esplendor... pero es parte de la historia y a veces la completa... aunque yo prefiero aquellas antiguas tonadas de las que me hice eco breve en el principio de esta entrada de hoy... “Todas las efes tenía la primer novia que tuve. Todas las efes tenía: Francisca, fresca, fregona, fea, flaca, floja y fría”... un tumulito de todos sobre el que poner mil lápidas con letras de canciones de verano.










Monday, August 30, 2010

Caballos recientes o lonchear cadáveres...


Caballos recientes o lonchear cadáveres y envasarlos al vacío [una idea de mafia carnicera], el sí y el no, ser el malo de todo para siempre, autoconfiscarme la idea de seguir y fumar hondo, cabrearme conmigo mismo por haber escrito sobre una radio de Béjar [me prometí silencio, me lo prometí, coño, me lo prometí], cenar como un mandril hambriento, silbar canciones de Silvio o de la Sosa, corcobarme en lo oscuro cuando cuadra, distar y jamás dictar, decir de nuevo la palabra ‘muslos’ o la palabra ‘blando’, mojarme un poco los pies, sentir que siento... playas, colimbos, toronjas amarillas, cuartos a media luz, pensiones... me viene de perilla que se me vaya el coco y las manos se me despiecen en palabras inconexas... rubor, rouge, clarinete, círculo...
Truenan los viejos árboles con la labor del viento y miro allá, ponerse, a un sol anaranjado que no es el de ayer, que éste es algo más étnico y mercúrico... se lo come el horizonte como una comunión lenta y, apenas oscurece, se rayan de murciélagos cieguísimos las hembras de la noche... hay una brisa tenue que agrada y me dejo caer sobre el respaldo despreciando las luces titilantes de la ciudad al fondo... y subo las rodillas hasta pisar el raso del asiento... estoy descalzo...
Las noches y prenoches bejaranas, que van hasta el betún, son como de avaricia... y en el suelo se gesta el incontrol de los insectos con su temblor preciso y casi mágico... y en la raya del fondo, como una luz de gas, crecen las casas imaginadas en los ojos... y hay algo que aquí adentro se alumbra, algo que es como un vértigo pequeño y mantenido... siempre le tuve miedo a los payasos, un miedo cervical e incluso gástrico... los veía de niño entre mis sueños con sus caras pintadas, acechando... y aún los veo si la noche me pilla paleontólogo o insomne...
De luego de más tarde, llega el bar, con su pintor jocoso encargando cicutas para alcaldes, con el sudor constante de camareros ciertos vestidos de ese luto servicial tan camarero, con Alberto dejándome lamido en un catálogo que CERCO ha llevado por distintos institutos Cervantes de países diversos [introduzco al colega y también al amigo Fernando Malo... toda una iteración de este palabrero arrimado al trasunto cerámico... y yo sin enterarme]... y que me vuelvo al pilla-pilla imprentero con carteles enormes de fiestas llenos de anuncios, con programas celebratorios que contienen hasta una “gymkana guarra” [es sic y resic], con cartelones gigantes para casas de lujo, con transparecias para armarios de cocina, con rotulaciones de furgonetas viejas... y me canso y me descanso [me canso a los dos minutos y me descanso cuando cierro el negocio con el final de la tarde]... y vuelta a la noche bejarana y al no entender ese ‘¿por qué Béjar?’ que me llega urbino [de] y ortizado... todo es un trabalenguas dicho por un tragasables... la noche bejarana, casi mostrenca mientras lo toma todo y Ángel dale que dale al qué es esto y esto y esto y esto... pues es la vida, Ángel, coño... la vida... si ya te lo he dicho mil veces... la vida es esto, esto y esto... que así me lo han enseñado a mí, primero los curas salesianos y más tarde el mundo siendo mundo, coño... esto, esto y esto... ya ves qué sencillo... y otra vez lo murciélagos rastrillando en el aire sus alimentos leves... y las farolas ámbar, y las sombras chinescas de los árboles según pasan los coches, y las luces al fondo haciéndose agua turbia, y el calor aminorándose.

Ya dije: caballos recientes o lonchear cadáveres.

Sunday, August 29, 2010

esebecutalgia


Ando estas últimas semanas engolfado en darle una vuelta de tuerca a los proyectos solidarios de SBQ. He de confesar que he estado muy bajo de forma en los últimos meses [todo propiciado por los problemas personales de trabajo y por el pequeño desánimo de no poder ver cumplidos algunos plazos que me había impuesto]. La verdad es que no he parado en todo este tiempo de darle vueltas a los asuntos solidarios diversos en los que estoy metido, pero también ha sido tiempo para la reflexión, para retomar los proyectos y buscarles las vueltas de otros modos.
Entre los asuntos tramitados y no explicados aún, están fundamentalmente dos realidades que alumbran nítidamente hacia el futuro: el grupo de Perú ya es absolutamente oficial [nos ha costado un montón conseguirlo] y la decisión de aceptar ayudas institucionales externas a la organización [ya lo matizaré en otro momento] parece que servirá de gran ayuda para conseguir los fines previstos desde el principio [estamos colaborando con la Fundación Premysa, tramitando ayudas de la Fundación europea Biodiversidad y conversando con el SEDALIB peruano –la empresa estatal del agua– para llegar a un acuerdo fuerte de colaboración, así como ya se van a presentar en estos días unos proyectos importantes de pozos y reserva de agua potable en Gambia y Senegal [no hemos parado en la gestión, aunque sí nos hemos detenido un poquito en la información... me apetecía tener medio seguras las cosas para empezar a contarlas otra vez].
El hecho fundamental de mi desánimo [obviando el personal y el de trabajo] era fundamentalmente la dificultad para obtener fondos privados para la construcción de los tres centros de formación y acogida que ya están planeados y en proceso [la gente se cansa de ayudar y lo entiendo perfectamente], lo que tiene como consecuencia cierto desánimo en los lugares de acción [es perfectamente entendible que esperan unas construcciones que no llegan]... así que me puse manos a la obra para salir del pozo negro en el que estaba y se me ocurrió, después de darle muchas vueltas al asunto, que era muy importante mantener la ilusión y el ánimo de quienes esperan, así que estoy metido en el diseño de unas becas de estudios que harán que todo vuelva a su curso si tienen éxito. El asunto consiste en obtener información a pie de obra de las necesidades particulares de las familias de Trujillo, Ibel y Baro Kunda y elaborar dossieres detallados y verificados de que todo lo que en ellos se dice responde a la realidad [es un asunto en el que ya está trabajando el voluntariado SBQ en los países de origen], y a partir de esos dossieres informativos, crear una serie de becas de formación particulares y nominales que sirvan de empujón en la población afectada... con una cantidad de euros mínima, escolarizar a niños que tiene dificultades serias para ser escolarizados... y hacer un seguimiento de todos ellos, con información constante sobre la evolución y las necesidades del becado... ya dispongo de bastante material del Perú y en unos días estaré dispuesto a iniciar la campaña de becas con información detallada del asunto.
Creo que de esta forma se abrirá de nuevo el camino y se podrán ir limando los problemas de construcción física de los centros previstos.
Y que en eso estoy ahora, con ilusión nueva y con muchas ganas, que ya me venían haciendo falta.

Saturday, August 28, 2010

De la radio mientras trabajo y dos celebraciones emotivas



Se suceden los días y ando agobiado de curro [ya era hora, coño] hasta el punto de que en la imprenta apenas nos comunicamos [cada uno anda a lo suyo]... esta vuelta a tener labor me tiene algo más vivo mientras oigo de lejos la radio que Paco tienen encendida junto a su máquina... a veces pone Radio Tormes, una cadena de música pasada [demodé] que más o menos se me hace soportable, pero a ciertas horas conecta con una cadena de Béjar y al ratito me veo obligado a pedirle por favor que cambie de emisora, pues se me hace tan insoportable, que no me permite concentrarme en mi trabajo y lo hago todo mal... la razón es un programa con tertulianos espoleados por el locutor para que dejen la idea constante de que todo se hace mal en nuestra ciudad... así, los tertulianos se transforman en altos expertos en jardinería y riego, en tráfico urbano, en gestión cultural, en urbanismo, en gestión de residuos, en nuevas tecnologías, en administración, en macroeconomía y en microeconomía, en turismo... ‘expertos’ en todo lo pensable y lo impensable... y, claro, aportan sus ‘sensatísimas’ opiniones para argumentar la idea general del programa, que no es otra que en Béjar todo está fatal, todo funciona mal, todo se gestiona de pena [idea que el conductor del programa pregona hasta con sarcasmo]... gracias a que Paco me hace caso [no sé si dándome la razón] y cambia de emisora, mi trabajo vuelve a tomar tono y sigo adelante con velocidad.
Mi opinión al respecto es que ese baño diario de basurilla mediática responde a la libertad de expresión [estoy con ella, claro], pero también a la utilización de un medio de difusión para encauzar la opinión de los paisanos hacia un lugar que todos conocemos... y todo estaría bien si el grupo parlante se configurase en opción política y se presentase a unas elecciones para demostrar que lo que dicen sin reparo también son capaces de llevarlo a cabo en la justa realidad... mientras, dejan nadando una idea de la ciudad realmente triste y nada atractiva para quien los escuche [flaco favor nos hacen con respecto a quienes nos visitan], yo diría que la peor ciudad del mundo por donde se la mire... y aquí me gustaría reflexionar sobre si es digno utilizar un medio de difusión destinado al público en general para hacer pagar viejas deudas personales, para dejar salir fobias y rencores individuales y para capitalizar caminos de opinión a costa de lo que sea... la pena es que hay algunos tertulianos a los que conozco personalmente y a los que aprecio, y me molesta mucho verlos utilizados solo por el absurdo narcisismo de dejarse oír por las ondas... prefiero otros tonos y otras formas.
Yo, por mi parte, hace dos semanas tuve la oportunidad de ser entrevistado por la Cadena Ser nacional, exactamente en el programa “A vivir que son dos días”, dirigido durante el verano por Lourdes Lancho [acompañada por la inefable Jaio, un cielote], y busqué la primera oportunidad que me dejó Lourdes [era una entrevista de carácter literario] para invitar a todos los oyentes a visitar Béjar, mi ciudad, con la afirmación taxativa de que no se arrepentirán jamás de haber venido a mezclarse con nosotros... y todo ello a pesar de que me molesta un punto en lo personal que la ciudad se llene de visitantes [circunstancia de la que me quejo con frecuencia, pues amo a mi ciudad de invierno]... y ahora quiero decir muy claramente que la ciudad de Béjar es lo que es y tiene lo que tiene [que son muchas cosas] gracias a sus ciudadanos y a sus políticos [inclúyanse todos los partidos que han podido pasar durante el periodo democrático por nuestra Casa Grande], y que cualquier voluntad de ‘hacer’ [sean cuales sean los resultados] es digna de ser agradecida y hasta reconocida... y empezar a hablar bien de nuestra tierra, a venderla al exterior con optimismo y sin exageración es nuestra responsabilidad como bejaranos, nos situemos donde nos situemos... y es desde este punto desde el que no puedo entender que en ciertos medios se diga un día tras otro que todo está fatal [esos mismos medios que, cuando están en el machito los suyos, no hacen más que echar flores]... solo es cuestión de objetividad, de presentar opiniones diversas y colegiadas, de tener la voluntad positiva de reconocer todos los servicios que tenemos y de los que gozamos. En fin.
Y que madrugué en sábado para salir de bolo hasta Malpartida de Plasencia, donde participaba en el acto de presentación del libro que el amigo Higinio Mirón ha escrito sobre su padre asesinado por las hordas fascistas en la guerra fratricida del 36. Hice mi viaje tranquilo pasando de los 22 grados de salida hasta los 33 grados que marcaba el termómetro en Malpartida a las 11:15 de la mañana... una pasada de calor. Me asombró que a esa hora, en sábado de verano y con la temperatura a tope, el auditorio chinato apareciese lleno hasta la bandera para asistir al acto de presentación del libro sobre Pedro Mirón... se notaba emoción en los previos y entre el público estaban algunos socialistas bejaranos a los que aprecio [me encantó encontrarme con Ángel Calvo Meirama]... me tocó intervenir en primer lugar y centré mi intervención en el tiempo, partiendo del eslogan que Orwell creo para el Partido Único de su “1984” [“Quien controla el pasado, controla el futuro; quien controla el presente, controla el pasado”], animando a los asistentes a no quedarse aparcados en la lucha por la memoria usurpada y a dedicarse a luchar a diario en la toma de partido por un humanismo positivo que nos lleve a un futuro de dignidad y justicia, pues desde mi punto de vista es el mejor homenaje que le podemos hacer a nuestros muertos. Estuve algo nervioso, ya que el ambiente era, como digo, muy emotivo...
Terminado el acto [que me parece que quedó bastante digno], me despedí con velocidad para huir pronto del calor asfixiante chinato y para intentar llegar a tiempo al homenaje sorpresa a mi amigo y cuñado Antonio Gutiérrez Turrión por cumplir sus sesenta años y por coincidir ello con su jubilación del mundo de la enseñanza... y llegué a tiempo de asearme un poquito y correr hasta el paraje de El Castañar para participar en la celebración... y la cosa fue también emotiva de cojones, con Antoñito derramando unas lágrimas por la sorpresa y regalándonos mil sonrisas francas y bien abiertas [de las que mí me gustan]... lo pasamos realmente bien y hasta Antonio se nos puso Cochise durante un ratito al ver que su hermano Leopoldo le regalaba un tamboril y una dulzaina... tomó los instrumentos y se arrancó con canciones serranas que me sonaron a gloria bendita... y así nos fuimos hasta la plaza de toros bejarana, donde se dio el colega un símil de vuelta a ruedo cantando canciones y moviendo el culete junto a sus hermanos y Francisco... de mareo y de puro triunfo esa actuación... y que me pareció que habíamos hecho algo bueno, algo que a Antonio le quedará grabado durante muchos años en el cajoncito memorial de lo entrañable... y me sentí muy feliz de verle feliz y colmado de afectos... ¡Un abrazo, campeón! [son las cosas de entrar de morritos en el mundo viejuno].
No ha sido un mal día, coño.


Sunday, August 22, 2010

Pirochemise



Fue un día algo performance por lo pirochemise y por lo longilíneo de las piernas femeninas que volaban por Notesalves... era ni más ni menos que la inauguración aplazada [por deceso triste] de la exposición de Josetxo Lamy... y yo, que no suelo ir a este tipo de actos [entre otras cosas porque sudo como un animal en los espacios cerrados y me suena la tripa en los silencios], hice el gesto de ir [también el acto] como homenaje al amigo JL.
El ambiente andaba entre lo espiritista y lo espirituoso... falta de luz, velas por doquier, actores entre el público, poesía declamada con grandilocuencia, mímica patentizadora de un estado genético del hombre y de la mujer, caras serias y público desigual [de procedencia y usos]... y se logró cierta magia, una magia de lo oscuro tanto en lo físico como en lo anímico, una magia que a veces me traía un saborcillo a lumpen y otras veces me dejaba cierto regusto cabaret de la Alemania en guerra... vamos, que disfruté con los ojos, con los oídos y hasta con el olfato [me faltó el tacto, coño]... y me harté de hacer fotos a tiempo, con el objetivo abierto buscando imágenes en la oscuridad. Tal fue mi concentración en el foteo, que en un gesto de encuadre me agaché y mi camisa negra Lacoste del 2004, que la llevaba por fuera del pantalón [en un sport discreto, pero elegante], tomó contacto con la llama de una vela y comenzó a arder... unas cuantas palmadas propias y algunas ajenas apagaron las llamas mientras mi pirochemise pasaba a formar parte activa y olorosa de la performance mágica prolamy... todo un numerito personal.
Del resto del asunto, me quedo sin dudarlo con la danza pareada femenina en camisón blanco... los vuelos, los músculos tensándose, los gestos de la manos [divinos por momentos], las bragas asomando sin rubor entre las piruetas, las cabriolas y los tráfagos [pues a veces eran negocios dolorosos de los dos cuerpos blancos]... me quedo con la cara de Luis [anonadado/enamorado], con la sonrisa entera de Josetxo hecha de dientes blancos, con el rumor al fondo, en la escalera, de dos cuerpos masculinos abrazados, con la cara de miedo de una señora entrada no sé si en vejez o en años, con la boca entreabierta de unos cuantos...
Luego me pregunté por los que estaban, por su gestión [digestión] del acto, por su enfoque del mundo, por su estesis [de feeling], por su criterio formado o deformado, por su gesto de estar siendo parte de un algo que contesta sin más a lo no preguntado...
Ver los cuerpos moverse, mezclarse, incontenerse... ¿quizás no fue teatro?
Y mi pirochemise negra de 2004 pasará a ser la nada del mundo de los trapos... ella, que sabe todo de mi pecho estrechado, de mis axilas viejas, de mis brazos/abrazos, de mi sudor de hombre, de mi espalda de cándido, de mis lomos dolidos por los cistos ciáticos, de mi vientre ingaláctico, de mi cerviz retórica y del pubis boscoso que atesora lo ingrávido... ¡mi camisa!... la negra... la de leer poemas, la de salir de noche, la que me hacía delgado... la voy a echar de menos, porque siempre me he atado a cierta ropa usada que apenas ve el armario... la voy a echar de menos, porque era piel y tacto, recuerdo, olor, textura, refugio de lo blanco, parte de mí...
Mañana iré de tiendas a buscar otro hábito como el que se ha quemado... y tendré que enseñarle a ser mi cuerpo exacto, a llevar mis palabras a su gesto precario, a asedarse en piel y a llevarme marcado de este luto que soy, constante y desgarbado.


•••

No puedo por menos que volver a mi camisa negra Lacoste del 2004, pues no se aparta de mi mente esta mañana... sí, ya sé que tenía una pequeña quemadura en el faldón derecho, una quemadura que me hice con el secador serigráfico hace unos meses y que le había dejado un cerquito de cuatro centímetros de color marrón oscuro; ya sé que tenía un par de agujeritos fruto de mis cigarros mantenidos encendidos en la boca mientras escribo, ya sé que el cuello estaba agrietado mostrando algunos puntitos blancos en la zona de roce, ya sé que el segundo botón de arriba se me desabotonaba solo de puro uso... pero era mi camisa favorita, la que me acompañaba siempre en mis lecturas poéticas, la que viajó conmigo a todos los lugares a los que he ido desde que la tengo... ella tiene sellados en su tela seis intensos años de mi vida y de la vida de mi cuerpo físico, con sus humores y sus restos... me encantaba ponérmela en invierno sobre una camiseta de Wody Allen que me regaló mi hija Mariángeles... y en verano siempre la he llevado con las mangas regazadas y por fuera del pantalón... con ella me sentía cómodo y seguro... y marcaba mi estética junto a un pantalón negro parduzco, también Lacoste, que adquirí en 2003 y que ya está tocando a su triste final por viejito [asoma parte de mi rodilla por la patera izquierda y la zona del culete empieza a transparentar]... y es que soy un maniático con mi vestuario, me cuesta que una prenda pase a ser ‘mía’ y, cuando lo hace, ya no paro de ponérmela, a diario, constantemente [solo aguantan fuera de mi cuerpo en los tiempos de lavado y secado].
Su adaptación a mí consiste en conseguir que yo me sienta desnudo, que perciba que mi ropa es parte de mi piel, de mi cuerpo... y me gusta que envejezcan conmigo, que tengan pequeñas heriditas de guerra solventadas en manchas, rozones, pequeños desgarros... y todos con su historia, que es parte de la mía... me encanta que sean de marca [fundamentalmente Lacoste] y que vayan perdiendo ese porte pijo y estirado de natural para tomar mi estética descuidada... podría decirse que visto andrajos de marca... y eso, que ya no está mi camisa favorita y que la cosa me pone un poquito triste, pues generalmente tengo otra en proceso de adaptación, pero la que anda en ese estado no me gusta mucho, ya que pertenece a una serie que sacó Lacoste el año 2009 con la desafortunada idea de poner en el interior del cuello y en el interior de los puños unos trocitos de tela mil rayas en blanco y negro, y eso me distorsiona bastante...
Sé que todo esto es una imbecilidad y que la mayoría del personal pensará que, con lo que sucede por ahí, estas cuitas mías son de purito tonto del culo... pero las padezco, coño, y no lo puedo evitar.

Thursday, August 19, 2010

Mi memoria lítica


Oye, que fui a pillar mi ejemplar de “En busca del bien y del mal” de la estantería de mi estudio y, de pronto, me di cuenta de que tengo una extensa memoria lítica dormida junto a mis libros... mis dos estudios están llenos de rocas y de fósiles, y en mi casa hay bastantes pedruscos desperdigados por los muebles... y es que siempre que viajo suelo pillar alguna roca de la zona por la que camino, y hasta varios amigos acostumbran a traerme algún pedazo de mundo de sus viajes... el caso es que no había caído en la cuenta de que tengo una memoria de más de cien pedacitos del mundo... trocitos del Valle de los Reyes egipcio, geodas de Tanzania, estromatolitos del lago Manyara, fósiles de no sé dónde que un día me regaló Jaio, trozos de mármol de edificios emblemáticos derribados, lava volcánica del Etna y del Vesubio, bombas volcánicas del Monte Meru o de Kambi a Simba, arena del Sahara en un botecito y una rosa del desierto del mismo lugar, un nido de avispa fosilizado y pillado en Canarias, un canto rodado de Paracas y el trocito del Cañón del Colorado que hace unos días me trajo Joselín... y un montón de rocas más que me van a obligar en estos días a hacer memoria.
Quizás el dedicarle unas horas a mis rocas me vuelva a traer ganas de poesía otra vez.

Canto rodado de la playa de Barra (Aveiro, Portugal). Regalo de Guadalupe.

Mármol del desaparecido Teatro Bretón salmantino.




Fósil regalo de Jaio.

Trocitos del Valle de los Reyes.


Geoda.

Bomba volcánica de Kambi a Simba

Estromatolito del Lago Manyara.

Rosa del desierto del Sahara.

Fósil regalo de Jaio.

Lava del Vesubio.

Bomba volcánica del Monte Meru.


Wednesday, August 18, 2010

Nostalgia de África


Hoy, sin quererlo, mi Guille me trajo de golpe toda la nostalgia de África... había encontrado entre mis cosas del estudio de Colón un cochecito tallado en madera que traje de mi viaje a Tanzania... lo encontró desbaratadito [tanto Felipe como él han jugado mucho con esa pieza cuando eran chiquitos] y le hizo un arreglo completo antes de darme la sorpresa... se presentó en el salón de casa y me dijo: ‘mira, papá, te he arreglado el coche que nos trajiste de Tanzania; llévatelo a tu estudio para que no se pierda’. Yo tomé el cochecito con mis manos y besé a mi chico con fuerza antes de que la memoria volviese a mí por el tacto de ese trozo de madera con forma de juguete... hacía calor en Arusha y era mi anteúltimo día de estancia en Tanzania... solo me quedaba comprar algunos regalos para la familia y para los amigos, y dediqué ese día a visitar la zona de mercado del centro de la ciudad para ver qué podía adquirir... recuerdo que empecé buscando una tanzanita engastada en un anillo, pero los joyeros indúes que visité [todos los joyeros de Arusha eran de procedencia indú] me pedían precios demasiado elevados para mi presupuesto, así que acabé comprando un granate, una pequeña pieza de lapizlazulí y un ópalo de un tamaño considerable... luego me dediqué a buscar algunos batik distintos a los que llevaban los vendedores de calle, que eran todos iguales y no me daba fiabilidad de que hubieran sido realizados por la técnica de ceras y anilinas típicas de la zona... y encontré la tiendita de un pintor tanzano que resultó ser uno de los más conocidos artistas del batik de Tanzania [recuerdo que el tipo se llamaba Kirita]... allí me dejé gran parte del dinero que me quedaba, adquiriendo doce piezas únicas y magníficas que hoy se reparten por las casas de amigos y familiares... y terminé en el mercado de calle con ese rifirrafe del regateo [ahí se movía mucho mejor que yo mi amigo Juanito, y le dejé hacer], del que salí con collares masaai de semillas, separadores de libros en piel con forma de animales africanos, máscaras de diversos tipos y tamaños, pañuelos, amuletos de la zona de Karatu y este cochecito que ahora tengo en mis manos y que no es otra cosa que un juguete muy al uso entre los niños de las tribus de la zona del Monte Meru y los territorios de Ngoro-Ngoro [eso sí, uno de los juguetes caros a los que pueden aspirar aquellos niños]... junto a ellos, me traje bombas volcánicas que recogí en Kambi a Simba, tres estromatolitos grandones que pillé en el lago Manyara y una botellina de ‘cognagy’ que me regaló Carlitos [el viceministro de deportes tanzano], además de mi diario manuscrito y unas cuantas picaduras de mosquitos enormes...
Así que hoy tengo nostalgia de los baobabs de Mangola Chini y de los árboles botella del camino hacia Longuido, de los jacarandás y las bugambilleas en las avenidas enormes de Arusha, de la tierra roja de Karatu y los Dk-dk siguiendo a nuestro coche, del miedo caliente en el Río de los Mosquitos, del gallo vivo que me regalaron en Kambi a Simba [el Campo del León], del huevo de avestruz del que salieron 18 tortillas, de los jodidos padres espiritanos y de los niños persiguiéndome allá donde fuera, gritando siempre su hermoso: ‘mzungu, zucari’.
Es chuli... y quiero volver.





Tuesday, August 17, 2010

Aisha


Se me cae la babita, coño, de ver a mi chica Aisha tan linda, de ver a mi You tan padrazo y de ver a mi Sandra tan feliz... hoy vinieron a verme justo a la hora de cerrar la imprenta, Aisha lloró un poquitillo en su carrito y You la tomó en sus brazos para que se calmase... yo aproveché entonces para hacerles esta foto... es linda, ¿no?

Monday, August 16, 2010

Estreno mi nueva Nikon con una tormentona en la Peña de Francia


Sobre mí estaba el cielo totalmente despejado, y en el horizonte, cortado por los picos de la Sierra de Francia, se desató de pronto un tormenta magnífica... el resto lo hicieron el intenso contraluz, el agua cayendo y mi cámarita nueva... flipé durante más de media hora, lo juro.